Hay películas en las que el espectador se siente como el
juez que espera todas las pruebas para dictaminar su veredicto. Quieres conocer
todos los detalles para intentar comprender qué mueve a los personajes a tomar
ciertas decisiones y en ese escrutinio, inevitablemente, surge la pregunta:
¿Qué haría yo si estuviese en su lugar?
La respuesta no tarda en llegar. Desde casi el principio de
la película ya tienes claro tu posición. Ahora está por ver cómo van a
actuar y solucionar el problema que se les plantea los padres de ambas familias. ¿Qué
harías si después de seis años viviendo con tu hijo te dicen que no es tuyo?
Debido a una confusión del hospital, tu hijo biológico vive con otra familia.
¿Qué haces?
Hirokazu Kore-da se vale de esta pregunta para hacernos
reflexionar sobre diferentes temas: las relaciones entre padres e hijos, la
educación y el tema de la adopción en la sociedad japonesa de nuestros días.
Una sociedad en la que todavía esta presente un sentimiento conservador en lo
que respecta a la importancia de la sangre. Según Kore-da la mayoría de los
japoneses dirían que los hijos biológicos son mejores que los adoptados. Esto
si lo extrapolamos a cualquier sociedad, ¿la polémica está servida?
No es difícil de imaginar que movió a Steven Spielberg para
interesarse por la película y comprar sus derechos. De tal palo, tal hijo es
una historia familiar sencilla y bonita, con una puesta en escena y una imagen
cuidada, que entretiene e invita al diálogo.
J.A.G
