martes, 3 de febrero de 2015

Babadook



Se trata de un interesante debut de una directora australiana (Jennifer Kent) que ha sido reconocido en el festival de Sitges 2014 como mejor actriz y premio del jurado. La aceptación parece que ha sido menor en taquilla, pues ha desaparecido de las V.O. tras dos o tres semanas, y sólo queda en algunas multisalas y en horarios raros. Una pena, pues creo habría merecido mejor suerte. Pero sabido es que las que se mantienen en cartel son las “grandes” por el poder de sus distribuidoras, no por el talento que se dimana de su contemplación.

La aportación de Babadook al cine de terror es original y notable, pues tratándose de una película claramente de género, consigue subvertir la tendencia y los resultados finales de toda película de terror, convirtiéndose en una historia de múltiples lecturas y de identificación amplia con un público, que no necesariamente tiene que ser aficionado a las películas de miedo (si además lo es, con Babadook disfrutará el doble.)

Actor ( niño ) y actriz ( madre ) están realmente notables en su trabajo actoral. Essie Davis, bien habría merecido una nominación al oscar de interpretación. Quizá es que Tasmania cae algo lejos de la meca del cine.

La película tiene una textura y una manera de abordar las historias  de endemoniados que consigue lecturas y giros inimaginables, sobre todo en el final de la narración y en las conclusiones a que nos lleva. Mención especial merece también los extraordinarios dibujos y el diseño del cuento que da título a la película. Todo un ejemplo de terror elegante y original. 
 Los que no hayan tenido oportunidad de contemplar esta película en pantalla grande, quizás puedan subsanarlo con una visión casera en D.V.D. Pero tratándose de un filme de este género, y de la persuasión que se produce en la sala y pantalla grande, ya no será lo mismo.


Manuel Fonseca